Cuidar el medio ambiente es también una inversión a futuro. Lo que puedas hacer hoy te ayuda a garantizar la calidad de vida tuya y de tu familia en un futuro.
Proteger el medio ambiente ha dejado de ser una moda para convertirse en una obligación. Hay aún mucho por hacer y puedes empezar por pequeñas acciones. Son sencillas y no requieren mucho esfuerzo, pero sí tendrá un gran impacto en tu bienestar y en el de los que te rodean.
Aquí te sugerimos algunas para empezar:
- Adiós a las bolsas de plástico
Es momento de sustituir el plástico por otros materiales más amigables con el medio ambiente, como bolsas hechas de fibras naturales, materiales reciclados o plásticos biodegradables. Dependiendo del tamaño, una bolsa de tela grande puede sustituir cinco o seis bolsas medianas de plástico. Piensa en todos los desechos que estarás evitando. Es importante que no olvides llevarla cuando vayas al supermercado o de compras. También evita utilizar bolsas cuando compres artículos pequeños que puedes llevar en las manos o en algún bolsillo de tu ropa.
- Reciclando lo electrónico
Si vas a renovar algún aparato eléctrico o electrónico, como computadores, celulares o refrigeradores, investiga qué lugares reciben estos equipos para reciclaje. Ellos darán el tratamiento adecuado a sus componentes. También puedes aprovechar las promociones de algunas empresas que aceptan el equipo antiguo y te hacen descuentos en la compra de un equipo nuevo.
- Compras al por mayor
La ventaja a tu economía es que los precios al por mayor suelen ser más bajos que el precio individual de un producto. Pero además, es una gran contribución al medio ambiente, ya que implica menos empaque y por ende, menos desechos. Siempre que sea posible, elije las versiones más grandes de algún producto, sobre todo de aquellos no perecederos o de los que tienen altos niveles de consumo en tu familia. Otra ventaja: duran más y reducirán tus visitas al supermercado.
- Ajústate a tus necesidades
Tal como lo dicta la regla popular, en muchos casos "menos es más". Cuando vayas a adquirir aparatos eléctricos nuevos, considera el tamaño con base en tus necesidades reales. Por ejemplo, si tu apartamento es muy pequeño, no compres la pantalla más grande. Piensa que no podrás aprovechar al máximo tus capacidades, pero sí estarás generando un consumo de energía innecesario.
- Centraliza tus servicios
Para ahorrar tiempo y dinero, ubica cerca de tu casa u oficina algún lugar que reúna varios locales, como bancos, lavandería, reparaciones de calzado, supermercado, farmacia y otros servicios comunes. Reúne todas tus necesidades y optimiza una visita para realizar diferentes actividades de manera simultánea. Ahorrarás pago de estacionamientos, gasolina y por supuesto, contaminarás menos.